Consejos imprescindibles para alquilar una casa

Has ahorrado algo de dinero para alquilar un piso y estás listo para hacer una mudanza. Es un gran paso que requiere preparativos.

Es importante que te orientes sobre cómo tomar la decisión correcta que hará que tu esfuerzo valga la pena.

En este artículo, leerás los 10 mejores consejos para alquilar una casa con éxito. Destacan lo que debe hacer para asegurarse de elegir la mejor casa que se adapte a su estilo de vida.

Están relacionados con sus finanzas y con cómo piensa gestionar el aspecto financiero del alquiler de la vivienda. Es mejor estar preparado de antemano en cuanto a las responsabilidades financieras que ser cogido desprevenido. Sigue estos consejos de Costa del sol pisos nuevos en Málaga:

1. Averigüe los precios de otras casas de la misma zona

Averigüe el precio de alquiler de las casas de los alrededores. También puede comparar precios teniendo en cuenta las características físicas de cada casa.

Si tiene en cuenta la estructura, el tamaño y las instalaciones de cada casa, la comparación de precios también le resultará útil.

Descubrir el precio te ayudará a saber si el precio que te ofrecen merece la pena o es escandaloso.

2. Entender el coste de la vivienda

Ya tienes un presupuesto, pero los gastos extra de alquilar una casa podrían sorprenderte. El alquiler en sí es una cosa y los gastos extra son otra.

Las facturas, las reparaciones, el mobiliario e incluso los honorarios del agente son costes adicionales que hay que prever.

Después de pagar el alquiler, es posible que tengas que pagar la luz, el agua y otras facturas. Los gastos de reparación también pueden correr de tu cuenta. Y, sobre todo, debes conseguir muebles y otras decoraciones interiores para amueblar tu casa.

Conocer el coste total e incluirlo en tu presupuesto te será de gran ayuda.

3. Acuerda un plan de pagos

Los pagos del alquiler vienen en diferentes paquetes.

Debes conocer el estilo que adopta el casero o el agente para obtener el pago del alquiler. Puede ser mensual, trimestral, semestral o anual. También puede implicar el pago por adelantado. Saberlo de antemano también te ayudará a determinar si te conviene o no.

Recuerda que eres tú quien alquila la casa, así que sólo se debe acordar lo que te convenga. Hay que evitar cualquier plan de pago que suponga una carga para tus finanzas. O se puede elaborar y acordar un plan mejor. Además, entienda cómo sería el aumento del alquiler, si lo hubiera.

4. Inspeccione la casa por si hubiera algún desperfecto

La reparación de los daños que no hayas causado puede correr de tu cuenta.

Algunos daños pueden haberse producido en la casa antes de que te mudes, sobre todo si no eres la primera persona que vive en ella. Una casa nueva también puede tener defectos de construcción. Por lo tanto, es necesario inspeccionarla aunque sea nueva.

Comprueba si hay grietas en paredes y suelos, fugas de grifos o tuberías, puertas o ventanas rotas y todo lo que haya en la casa. Esto es vital para que puedas informar al casero o al agente de reparaciones antes de mudarte. No querrás ser responsable de lo que no has causado.

Cualquier defecto que pueda causar daños debe ser reparado antes de que te mudes.

5. Haz pruebas del estado físico

No hay nada tan bueno como una prueba irrefutable.

Aunque hayas informado al casero o al agente sobre los defectos de la casa, también debes tener pruebas contigo.

En algunos casos, los desperfectos de la vivienda pueden ser algo con lo que te puedas apañar hasta que se haga una reparación. Entonces, mudarse no será un problema.

También hay que dejar constancia de la información facilitada al propietario o al agente sobre los daños. Puede ser en forma de vídeo o fotos que sirvan como prueba de que el daño o defecto estaba presente antes de que te mudaras. También puede ser adecuado tener un documento escrito firmado por ambos como prueba.

No hay que descartar el lugar de las pruebas en nada, ni siquiera en la vivienda.

6. Haz las reparaciones que puedas

No dejes al azar o al casero lo que puedas arreglar.

Los desperfectos pueden ser algo que tú puedas reparar o conseguir que alguien lo haga. No dudes en hacerlo si está dentro de tus posibilidades. A veces, el casero puede cargarte con la responsabilidad de las reparaciones. Debes acordar cómo se efectuarán los pagos de la reparación.

Si vas a asumir la responsabilidad de las reparaciones tú mismo y a tu costa, asegúrate de que sea con el consentimiento del casero. Eres inquilino, así que debes obtener el permiso adecuado del propietario de la casa antes de repararla o hacerla.

Por mucho que tu seguridad en la casa sea esencial, debes pedir permiso para arreglar cualquier cosa.

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